Desde el jueves y ante la rapidez de las encuestas postelectorales en Reino Unido (hola, CIS) ha quedado claro que la personas de más edad han votado por la salida del Reino Unido de la Unión Europea y los de menos edad lo han hecho a favor de la permanencia.
Rápidamente en España los listos morados de siempre han querido hacer su paralelismo con las Elecciones que mañana tenemos en nuestro país: votar como lo hacen los de más edad, es votar como los que han decidido el Brexit.
Los viejos son los que “hipotecan” el futuro de los jóvenes, sentencian. Pero ellos mismos se olvida de otras variables igualmente medibles y evidentes: los que tienen menos preparación académica, los que pertenecen a clases sociales más desfavorecidas o con menos ingresos.
No les gusta decir que los pobres del Reino Unido han dicho no a la Unión Europea no por la falta de derechos sociales y de solidaridad, sino por la abundancia de generalidad de ellos. Muchos temían que sus “pagas” se las llevasen los inmigrantes mediterráneos y los ascensos a los que aspiraban después de años de trabajo sin cualificar se lo llevasen esos jovencitos infinitamente más preparados que ellos en el momento que hablasen un inglés decente.
No es sólo ni principalmente una cuestión de edad. Los pobres, los que tienen menor cualificación, los que están en una situación más débil son los que han votado por el Brexit y lo han hecho porque no quieren solidaridad con nosotros. Es una realidad triste, pero es la que es; lo otro es simple manipulación.
Os dejo los datos de The Guardian: