“Yo era un diputado de mierda por una sórdida, vacía y aburrida provincia”, así me ha sonado la explicación de Pablo Casado respecto de su posición dentro del Partido Popular cuando ocurrían los hechos que están dentro de la investigación denominada “Kitchen”. Casado ha dicho que él sólo era “un simple diputado por Ávila”, lo que mi cerebro ha traducido por lo anterior.
No tengo elementos para decir que Casado estaba o no estaba dentro de los círculos que presuntamente decidieron utilizar medios policiales para espiar a Bárcenas. Si él lo niega, he de creerle, pero no debe mentir y decir lo que ha dicho.
En primer lugar porque no hay simples diputados, porque un diputado representa a una provincia y al país al completo y él debería ser conciente de ellos. En segundo lugar porque Pablo Casado era algo más que un diputado, ya que ocupaba una alta jerarquía dentro del Partido Popular.
¿Quiere esto decir que lo sabía? No necesariamente. Pero él podía haber dicho que estaba fuera de esos grupos de decisión si los ha habido, que nunca se habló en su presencia de esos presuntos delitos, que sus funciones eran tan distante que nunca se relacionada, más allá de la cortesía, con las personas involucradas. Podía haber dicho muchas cosas, pero eligió una forma grosera que levanta más sospechas que dudas disuelve.
Muy contento con tu regreso. Espero seguir leyendo nuevas entradas.
Un saludo.
Muchas gracias. Espero poder escribirlas.