Hablaba ayer de que el momento político de Obama no es equiparable al de otros líderes políticos europeos: él ha llegado al poder después de estallada la crisis económica y todo lo que se hace se valora como una dura política contraria a la crisis, mientras las medidas que adoptan muchos líderes europeos, esencialmente las mismas, son percibidas como propias de gobiernos superados.
Un fuerte apoyo popular tanto a su persona como a su política hace que sea preferible estar en sintonía con él que no estarlo, porque si no se está del lado del Presidente se puede pagar en las primarias del Partido Demócrata, en el caso de los demócratas, o en las elecciones en el caso de los republicanos.
Dada la fragmentación de las elecciones americanas (en 2010 se renueva nuevamente toda la Cámara de Representantes y un tercio del Senado) es mejor contar con el apoyo de un Presidente enormemente popular que presentarte como un opositor a éste, y más si en tu distrito ganó Obama o es muy respaldado. Eso hace que el sentido del voto en el Congreso sea más domeñable.
Evidentemente la popularidad de Obama no crece por generación espontánea, sino por un trabajo serio de Comunicación Política, siguiendo la máxima de que lo que no se conoce es como si no se hubiera hecho. Cosas tan sencillas como decir que Obama lee cada día diez cartas de ciudadanos particulares está muy bien hacerlas, pero es mejor hacerlas y decir que se hacen.
Puede parecer una hipocresía si pensamos en aquello de que lo haga una mano no se entere la otra, pero de que los ciudadanos conozcan que el Presidente hace cosas por ellos, que el Presidente no deja de querer enterarse de los problemas de las personas sin mediadores, dependen que ese Presidente tenga o no la fuerza política para llevar a cabo las reformas para las que fue elegido.
La pregunta es: ¿en el caso del PSOE no se sabe explicar lo que se hace o simplemente NO se hace?
Realmente sólo hablaba de Obama, aunque resulte sorprendente. Sobre la aplicación a España estoy dándole vueltas que tampoco es tan directo.
Lo de las 10 cartas me parece genial, de verdad. Es un detalle que puede parecer insignificante o sin mucha repercusión, pero esconde la esencia del personaje Obama; la esencia que explica por qué es Presidente…
buen post!